Convertir videos con FFmpeg sin tocar la terminal

Mi suegro tiene una enorme colección de películas que no puede ver porque están en... VHS. Son literalmente imposibles de encontrar en DVD o en alguna plataforma, así que de cuando en cuando me pide que le grabe alguna en el disco duro que tiene enchufado a la tele.

Como no tengo capturadora, lo soluciono tirando de mi viejo y fiel aMule. Pero los cinéfilos suelen colgar estas joyas con una calidad estupenda, lo que quiere decir ficheros de varios gigas de tamaño, lo que se traduce en que el lector de la tele de mi suegro ni se entera de que están allí.

Solución, recodificarlas en una calidad más modesta.

Hay muchas herramientas estupendas para recodificar una película, pero nada de la eficiencia, flexibilidad y rapidez de FFmpeg. Lástima que comprender y memorizar todos los parámetros necesarios para lanzarlo desde la consola queda muy lejos de mi capacidad de retentiva. Esta vez, la consola no es mi aliada.

Pero hay un programa llamado MystiQ que se encarga de manejar a FFmpeg por mí, a golpe de ratón. Además, mi felicidad es completa. MystiQ está en los repositorios y se instala desde Synaptic en un par de clics.

La aplicación es muy sencilla. Solo abre el fichero que quieres convertir y elegir el formato de salida. Para cada formato, tienes ya creadas varias plantillas, así que selecciona la que más se ajuste a tus necesidades. 

¿Necesitas personalizar más la configuración? No hay problema. Selecciona la película a convertir de la lista y pulsa el botón derecho del ratón. Allí tienes la opción para modificar la configuración, lo que se hace en una nueva ventana dividida en pestañas. 

Puedes cambiar los parámetros del audio para retocar su bitrate, o ir a la pestaña de video para rotar la imagen, recortarla, añadir subtitulos...

Por supuesto, tienes una pestaña para poder recortar el inicio o el final del video. ¡Y hasta una pestaña para ver los parametros que se le van a pasar a FFmpeg!

Y ya solo queda lanzar la conversión y esperar un poquito para quedar bien con el suegro.