Hijos de Debian: Linux Mint Debian Edition

No, no me confundo al llamar hijo de Debian a Mint. Al menos en esta edición. Parece ser que los creadores de Mint no están del todo conformes con la estabilidad de su padre, Ubuntu y han decidido hacer una versión basada en el que antes era el abuelo, Debian.

Mint está "tan basada" en Debian en esta edición, que utiliza su propio repositorio, y los de la propia Debian, tanto el principal, como los de seguridad, backport y multimedia.

Pero vamos a lo práctico. Lo primero, como siempre, es conseguir una ISO que llevarnos a la grabadora. Bueno, pues aquí esta. Una vez "tostada" arrancamos el equipo con ella, y ya podemos hacernos la primera idea.

La live es rápida en arrancar, pero como no estaba demasiado atento, no puedo decir si no me enteré de donde se selecciona el idioma o es que solo arranca en inglés. Pero bueno, eso tampoco es importante. En cuanto a la instalación, tienes el programa directamente en el escritorio, y es la mar de sencilla. A penas responder a unas preguntas y a instalar.

Bueno, una vez instalado, lo primero es comentar que el aspecto es fresco, muy agradable y despejado con ese fondo verde. Mas alegre que el morado de Ubuntu o el azul de Debian. Pero... ¡horror! solo hay un panel de herramientas abajo, falta la superior. Y además los menús tradicionales de Gnome no están, y en su lugar Mint usa su propio menú, todo en un botón, que me recuerda al de Windows.

Iba a respetar esa configuración gráfica, pero la verdad es que suelo tener muchos applets, y en una sola barra... así que al final añadí otra barra para los applets. Y aunque al final le di una oportunidad al menú estilo Mint, también se puede añadir como un applet mas el menú estilo Debian.

Me sorprendió un poco, que estando basada en Debian, el navegador por defecto sea Firefox, y también me sorprendió que por defecto, ya estuviera instalado java y flash. Buen chico. Pero una cosa que no me gusta de las útimas versiones de Ubuntu es que me falte Xsane. Por suerte, si esta instalado por defecto Gimp y Pidgin, y la instalación de programas mediante Synaptic nunca falla.

Con esta selección de programas ya instalados, donde también esta Openoffice, F-spot, Transmission, Thunderbird, Totem, etc. la puesta a punto es rápida y breve. Un gusto.

Una vez instalado todo a mi gusto, toca probar el funcionamiento, que se puede resumir como... ¡esto es un Debian puesto bonito! Y es que todo funciona bien, rápido y sin cuelgues. El aspecto es agradable, y ya con lo instalado inicialmente puedes hacer casi cualquier cosa.

Un problema es que al instalar no se define contraseña de root, por lo que hay que crearla para no depender siempre del sudo. Aunque bien pensado, no es mala idea que usuarios poco experimentados no tengan la posibilidad de hacer el bruto como superusuarios. ¡Que se lo digan a mi Debian!

Por lo demás, me parece una distribución muy fácil de usar, ideal para los que acaban de aterrizar desde Windows, y configurable y estable como quieren los que llegan desde Linux. A pesar de que mi ordenador no es precisamente moderno, la velocidad es buena, y este post esta escrito con ella sin problemas con solo unas horas desde que tosté la ISO.

En fin, creo que a partir de ahora, recomendare más Mint que Ubuntu.