Frankentatil. Reviviendo un viejo equipo por solo unos euros.

Este artículo no va a contar como instalar tal o cual programa, como configurar tal o cual cosa o como solucionar tal o cual problema. Hoy voy a contaros en primera persona como con una inversión ridícula he logrado rescatar para la vida útil un viejo portátil e instalarle un sistema operativo de última generación. Debían, por supuesto.

Hoy os contaré la historia de Frankentatil.


Allá por el 2007 me vi en la necesidad de contar con un portátil con el que pudiera ver alguna peli en DivX, oír música y conectar mediante la recién llegada tecnología 3G a Internet para navegar y poco más. Un amigo me ofreció un Compaq Evo610 que a él se le había quedado obsoleto para trabajar y lo compré encantado. Hizo su buen servicio, pero como soy mucho más de sobremesa que de portátil, quedó aparcado en un rincón.

Llegado el momento, empezaron a colonizar mi Pc Peppa Pig, Pocoyo, La Doctora Juguetes… hasta que directamente, acabó conectado a la tele y yo mirándolo sin poder tocarlo. Entonces recordé mi viejo portátil y decidí recuperarlo.

Primer problema. La máquina en sí ya estaba obsoleta hace ocho años, y aunque se pueda instalar Debían sin problemas, el rendimiento es malo. La solución, utilizarlo como un terminal tonto gracias a X2Go. Así podía cambiar los dibus o bajar otros o iniciar una segunda sesión para mis cacharreos.

Ya he hablado aquí de X2Go, así que no os voy a aburrir con detalles sobre este programita. Tan solo apuntar para el que no lo conozca, que es capaz de exportar todo el contenido de las X's vía SSH hasta un cliente, y así tener un control remoto o un terminal tonto con cualquier conexión de red.

Y empiezan los problemas. El portátil solo tiene conectividad por cable y por Bluetooth. Bueno, pues en sitios como DX o Tinydeal puedes conseguir un adaptador wifi para usb por solo unos euros. De hecho, he conseguido encontrarlos por menos de 5 euros.

Ya tenemos conectividad, ya tenemos un cliente para iniciar sesiones remotas o controlar la sesión activa… Llega el momento de desenterrar el viejo ratón para puerto serie (odio los touchpad) y conectarlo… ¡Pero no esperes que funcione! ¡No es tan fácil! Los ratones para puerto serie no son plug-and-play, hay que decirle a tu Debian que esta ahí y como debe manejarlo. Para ello usaremos el siguiente comando…

• inputattach --microsoft /dev/ttyS0

En este caso se trata de un ratón de los típicos compatible con los el estandar de Microsoft, conectado al puerto serie primero (/dev/ttyS0). Puedes ver todos los ratones compatibles con inputattach –help.

Y ya tenemos el portátil prestando servicio, hasta que el aviso de la bios sobre un inminente fallo en el viejo y cascado disco duro se hace realidad, comienza a sonar como una carraca y el equipo deja de arrancar. En mi tónica de gastar menos que un calvo en peines, queda descartada la posibilidad de comprar un nuevo disco duro y barajé la posibilidad de hacerme con un conversor IDE-USB para aprovechar alguna de esas tarjetas que quedan olvidadas cuando compramos una de mas capacidad para el móvil o la cámara de fotos. Pero al final encontré una solución más barata aún. Lo que reaproveché fue un viejo pendrive de 8 Gb.

Para hacerlo, solo tienes que configurar el portátil para que sea capaz de arrancar desde el USB como segunda opción. De primera dejamos el CD. Y el disco duro, directamente está en la basura. Iniciamos la instalación desde el CD y al llegar al particionado, seleccionamos “manual” y el único disco a seleccionar sera el pendrive. El resto de la instalación y uso del sistema es el convencional, con la salvedad de que el USB siempre será más lento que un disco IDE… ¡pero mucho más barato!

Y ya tengo a Frankentatil vivíto y coleando., con una inversión que no daría ni para una tableta de turrón del malo.